miércoles, 18 de noviembre de 2020

El recuerdo de una polilla

    Una polilla invade mi habitación,
Perturba con su aleteo
el orden de las ideas estancadas en el polvo.
 
Solo me toma un paso levantarme
para recibirle a la ventana,
afuera está helando.
 
Son cerca de la una y el bullicio es tal
que se escucha un telar de ocho patas
acompañando mi trasnocho.
 
Su calmado aleteo
me provoca una sutil compasión.
Es hora de que me vaya sin hacer ruido.
 
Libero el espacio de mi ventana
dejando pródigamente abiertas las cortinas
y una cama a medio tender.
 
Recuerdo verla aterrizar en mi cajita de memorias
Y sentir que sus patas anémicas
Profanaban la celda de mis veranos.
 
Retenida como una basurita en mis parpados,
clavada y seca de lo que pude evaporar
hasta desagotar todo en la quema.
 
Aquí me tienen,
Provocando el cuchicheo de fotografías
Sacadas de los rincones de mi armario
Donde murió quien por azar desenterró mi recuerdo.
 
Voy hablándote de mis miedos,
mientras el humo impregna la habitación
y la llama se apodera del contenido.
Pero tú estás tiesa, petrificada y algo parpadeante.
 
Te extraño,
con todo y su absurdo sentido literal.
 
Extrañaré más aún
el color amaderado de tu compañía,
la edad del pulso de tu corazón,
el sangrado amargo,
tus cicatrices al viento camufladas 
en tu frecuencia imperceptible.
 
Pero estoy fundido en esta silla
Cansado se seguir extrañando lo que la llama extingue
intoxicado, mareado, ahogando con la humareda tu recuerdo.

viernes, 7 de agosto de 2020

Preguntas

¿Qué si te quiero? (Suspiro)

Hasta donde te alcances a imaginar

Y una vida más.

 

 ¿Por qué?, 

Me replicas en tono burlesco,

Y yo solo te puedo contestar una cosa.

    “Te quiero porque tienes calidez de luna,

     Y yo soy un loco enamorado de tus noches.”                       

 

 Aunque no te vuelva a ver

Y las nubes opaquen mi vista,

Seguiré el camino de la madrugada,

Hasta encontrarte al final de mis días.

 

En la menguante,

Cuando mi cuerpo se funda con la tierra

y mi alma acaricie el rocío de tus palabras.

Bailaré contigo una última vez, desde la distancia

Hasta condenarme en tu olvido.                   

En mi tumba

quedará escrito con tinta de Nogal,

"Aquí yace un loco enamorado de la luna."                


miércoles, 20 de mayo de 2020

Mereces


Oye,
Mereces todo lo bonito de la vida
un sol con días cálidos que haga brillar tus ojos
una luna alcahueta que comparta tu trasnocho y te guarde un par de locuras
la lluvia que te moje la piel para cuando quieras llorar y tengas que sonreír
Mereces las palabras que no puedo escribir,
 Porque no se hacerlo,
 mereces la risa, la valentía y el miedo.
Vale la pena cada respiro,
 cuando personas como tú,
Le sacan una sonrisa a la vida misma.

domingo, 19 de abril de 2020

A QUIEN CORRESPONDA

Los sentimientos aquí descritos
son una lista de mercado
de los rincones deseados
de mi cuerpo, ya lo sabrán,
si les ha dolido un riñón.

Algunos juegan a perder todo
la noción del tiempo,
la dignidad y hasta el aliento;
mensajes de texto,
Citas casuales a un puesto de perros.
Les recomiendo un choque en automóvil.

Esta cordura se ha debilitado
Deseo desplomar todo
el picking corroe la superficie metálica
que recubre el laberinto, y yo,
estoy atrapado aquí afuera.

— El corazón es un pozo del que pocos afortunados logran salir, no hace falta cavar una fosa para un solo cuerpo, deja que el lodo y los gusanos cercenen lo que resta de un cuerpo en descomposición. No existe la profundidad, no hay retorno.  Sobrevive comiendo tierra hasta que la fortaleza colapse. Sigues cayendo, el corazón es infinitamente profundo desde su escondite dentro de la mente. 

Aquí abajo, odio la lluvia,
me da esperanza de volver a salir
Estoy harto de explicaciones
Ella lleva el reloj de su graduación a mi entierro.

Es tan real el engaño,
el dolor es tan intenso
que se resquebrajan las palabras,
Juntar un tomate con un mango,
¡ABSURDA ELECCIÓN!  

Escojo cada palabra
conforme la navaja apuñala mi pecho.
Estoy sentado en mi dormitorio
 intentando romper la hojalata
 que guarda el laberinto de rutas
 que ha tomado el corazón.

Solo deseo que sea feliz, a estas alturas no sé si estoy saliendo del laberinto o me voy a enterrar…
Si alguien pregunta - ¿cómo estás? diré: “Genial, estoy vivo.” Buenas noches.

domingo, 23 de febrero de 2020

A ciegas


Puedo confiar en ti a ciegas
véndame los ojos
y solo con escucharte
seguiré el camino.

Ella vendó mis ojos
y me estrellé
contra un auto en movimiento.

Por favor,
 la próxima vez usa las gafas,
no quiero atropellar
otro auto estacionado.

domingo, 12 de enero de 2020

Una luna diferente

Quiero regalarte una luna diferente
Estuve buscando entre las rocas
bañadas en el agua mareada sobre la mesa
bajo el colchón y hasta en el lavamanos

Busco una luna púrpura
que se aleja con los días
Una luna marchita que aún no cae
Una luna cómplice
bailando en el carmesí de su ocaso

Tan amarilla y redonda
como una naranja
Tan sutil
como las cortinas de la sala
 huesuda e móvil, bordada de blanco

Una luna fresca
como la brisa en el verano
Quiero regalarte una luna diferente
tan única como tú
Una luna de dahlias

sábado, 19 de octubre de 2019

Claustrofobia



Dentro del laberinto de una sola pared
Un gato se esconde bajo la cama,
Un maullido fúnebre camina al rededor 
Del enfebrecido frío de la habitación
Cada dos o tres minutos,
Parece que ahora duerme.

Estoy atrapado,
Paralizado hasta las tripas
Me sobra valor para gritarle 
Pero un temblor  me acalambra 
Siento su respiración en la nuca 
Sin buscarlo 
Le encontré las patas al gato.

miércoles, 18 de septiembre de 2019

Un gato


No todos los días llueve, aunque sea invierno.
Meli seguía preocupada, viendo como el agua corría debajo del banquillo de la tienda; nadie hasta entonces había logrado descubrir porque una nube le seguía como una rutina que no descansa, le llovía tanto, que nos  acostumbramos a verla con los ojos emparamados y la ropa mojada.

-      -      Sabes, lo que más me gusta del invierno es el pasto.

-                 -   ¿Quién eres?

-       -     Soy la sonrisa que dejaste cuando te faltaron tus amigos, las travesuras que hacías en casa cuando mamá no estaba, y el sabor de la leche en polvo que te comías a escondidas.

-                 - ¡Estás loco! Si crees que le haré caso a un gato parlanchín.

-          -  La vida es una mezcla de fresa con chocolate.

No recuerdo porqué se lo dije,
pero nos reímos tanto,
que su nube desapareció
y le dejo ver una sonrisa.

sábado, 22 de junio de 2019

Agrafía



No existía palabra que devastara mi parietal Izquierdo, Como la que flotaba en mi bóveda donde guardo el agua para llorar, el almuerzo estaba lleno de amorfas masas bañadas en un jugo de espinaca de color verdoso, al que daba nitidez anaranjada  el sol de las 3pm.  Aleteaban los temas más absurdos en la dentina de una fulana flaca sobre la mesa,  cada dos o cinco segundos.  Saco una cucharita chueca del vaso de vidrio, veo el ají  sin empezar, y decido poner puntuación a la cebolla. No dejo de pensar en el no se qué y  ya estoy en mi tartamudeo: A-E-I-O-U-O-I-E-A, muerdo mi lengua y trago la papa hirviendo. No recuerdo porqué empecé a escribir; tomates, carne despisillada, ¡CLARO! No puedo encontrar en mi plato una palabra que abra la bóveda y suelte el nudo en mis ojos, mejor lo olvido y empecé a llorar.

domingo, 28 de abril de 2019

Cuando se rompe todo


Cuando se rompen los huesos
Aún queda tejido
Y un dolor aferrado
En la incontrolable liquidez.

Cuando se rompe todo
La arritmia duele
Hasta llegar a la parálisis,
El cuerpo se inunda de monotonía.

Puede oscurecer más el naranja
Ahogado por la deflagración,
Escasos recuerdos inflaman la atmosfera
Al remover el sedimento de mis pensamientos.

Enardecido de fiebre llora
Hasta agotar el combustible,
He incinerado el castillo invulnerable
Donde dejaste tu huella.

Este desierto de carbón
Deja en el cielo nubarrones y mareas,
Humareda abultada en el límite de mis ideas,
No saldrá el sol hasta que deje de llover ácido sulfúrico en Venus.

domingo, 17 de febrero de 2019

Lagunas mentales


Solo queda el clip desgastado por mis molares,
Suspendido en el corte de  mi camisa,
Lo busqué por todos lados... ¡No está!

Es tarde,
Me siento al borde de la Silla
Mientras se tumba mi cuerpo sobre la mesa
Dejo caer una pecera de ideas,
Donde guppys, tetras y hasta un par de Colossoma macropomum,
Saltan y se consumen bajo la luz de mi lámpara.

Veo caer un par de Grillos chillones, tiesos y obstinados
Escapan de los rincones más olvidados de la gaveta,
No sé si era un grillo,
O uno de mis peces,
Solo mueren pronto sobre la mesa.

Sigo desplomado,  inmóvil
Recordando cómo sus manos frías temblaban
Al tempo que marcan sus latidos frenéticos.

Verla sonreír, daba al camino calma,
Le dije sin que su oído escuchara;

“Quiero perderme contigo  en lo inerte y en la vida, 
en el magnetismo y en la lluvia de radiación cósmica 
que mataría nuestros cuerpos. Te quiero regalar mis letras y mi respiración.”

Solo entendió un fugaz, nos veremos pronto
y se perdió entre las casas,
Y yo sigo sin recordar donde dejé el lapicero.  

domingo, 13 de enero de 2019

Confesión


No entiendo la profunda reflexión de tus corneas,
No entiendo que quieras de las personas, ni que te hayan hecho.
Sólo creo que es mejor compartir el tiempo
Con alguien a quien quieres mucho y poder reír con ella.

No busco nada.
Esta arritmia
sólo escribe lo importante que llegaste a ser
para los segundos de mi existencia...
No a cualquiera
se le da la oportunidad de matarte de a poco
a menos que seas un oficinista                             
preocupado por lo estrictamente racional y conveniente.

Claro,
Querer saber, conocer infinidad de personas,
Humores; es importante.
Vale la pena tomarse un café
y hasta planear una visita el sábado
al bosque para trotar, comer, jugar o volar cometa
todo es una ilusión.

miércoles, 9 de enero de 2019

Cordura

Tengo un dolor de muela
Siento latidos que hacen retumbar mi encía,
Estallidos de sangre por este  dolor en mi pecho
Solo quiero que una jauría de lobos me arranque piel
Y sentir de apoco sus mandíbulas quebrar mis huesos
Hasta que se estirpe mi vida.

Tengo un dolor de muela
Escondido en mi cabeza,              
Frío, insoportable y oxidado
Busco una peña para descolgar mi cuerpo
Y cercenar el fastidio que interrumpe mi sueño
Hasta que raye el alba y se vayan mis emociones.

Tengo un dolor de muela
Atascado en mis pulmones
Veo el veneno disolverse en mi jarra de alcohol etílico
Encrespado como una Mapanare.
Embebo del cáliz mortal en mi pecho perforado,
Las bolsas de aire mueren
igual que un ratón que ha caído en sus colmillos.

Tengo un dolor de muela
Que de apoco deshace mi hígado
Hirviendo en mi estómago, hasta darme sed
Se han evaporado las lágrimas de mi dolor, todo está claro
Nadie muere por un dolor de muela,
Me parece exagerado y sin sentido este drama
Iré a sacar cita en psiquiatría.

domingo, 9 de diciembre de 2018

Demencia

Se fue detrás
Con un pedazo de pan
En el café de su dentadura
Mordisquea con de ansiedad sus dedos,
Frenética locura
Ladridos de perros
A cada lado de las ventanas,
Ventilan el olor nauseabundo
A callejón corroído
Pútrido en escoria y papeletas
Se buscaba para matarse.

- Este malestar va a desgajar la cólera escondida en mis tripas. 

jueves, 11 de octubre de 2018

Recuerdo



¡Ah! mi amor
Tu reloj suspendido en pared
Acompaña mi desvelo
Cada golpe de su des calibrado segundo
Traza líneas a lapicero en el camino
De mi hormigueante existencia.

Reo de pensamientos circulares
Desplomo mi cadáver sobre un rincón callado
-Espero los ratones se compadezcan de mí
y perforen mis uñas-

¡Ay, mi amor!
Si los suaves murmullos
Enterraron  en mí sus púas
Quítame el aliento
Y desgarra los recuerdos
De esa mañana en octubre
¡Mátame!
 Hasta embriagarte de sangre.

Mi amor
Las estrellas acompañan la noche visible
Lanzadas hacia la piel ligera de un arroyo
Mis pies penetran el cascabel
De su cristal pulido
La lluvia conoce de a poco la figura
Que acompaña mi existencia
Mientras abrazo la hipotermia.  

Amor
Desprenden mis pupilas
Un llanto seco de aserrín
Esta noche cerré la ventana
Y me senté a extrañarte
Junto a la quebrada que reía
Con sus mariposas bailarinas.

martes, 31 de julio de 2018

Tan solo un hueso de Jibia

Nuestro humano 
dejó un hueso de Jibia, 
frente a nuestra casa de Guadua, 
¡Calcio! le escuché decir,
 Arremetí con furia, mi pico, 
sobre aquella bestia,
 una tras otra,
 gotas de sangre se hacen notar 
aún así, el aplanado cuerpo poroso,
 sigue intacto.

Primero sale la azuleja,
voy detrás, huyendo de esa víbora,
Escapamos de nuestra jaula,
El idiota al fin colocó 
el platico diario de alpiste,
 a un costado, allá, 
cerca a la guarida de sanguijuela blanca 
CALCIO DE JIBIA, 
solo hay una salida,
Volver a la entrada.

lunes, 16 de julio de 2018

Arcilla caducada


Cuatro hileras de bloque
A la altura de las rodillas,
Embadurnadas de pegamento,
Desgastan su corteza
Tallada en barro recocido.

 La temperatura
Ayuda a liberar estrés en los materiales,
¿Sumergido en qué
Puedo controlar el desespero irascible
De los suaves golpes
Gestados desde la falange del V dedo del pie
Al rozar la textura de cedro
Bruscamente?
Siempre estoy ligeramente de buenas.

Empezó a llover,
No creo que sea agua
La base, para mi enfriamiento
Se evapora muy rápido
Pensarlo me deja estofado.

Harto de divagar,
Pruebo con aceite
Si alguien puede describirme
Usaría solo dos palabras;
Despellejado y crocante.

Más parecido al carbón
Que a la carbonada,  
Dicto clase en escuela pública
Sobre tableros verdes,
Difumino en mí esencia
No por mucho tiempo
Hoy llego al desagüe.

miércoles, 9 de mayo de 2018

Mi vejez



Desaparece
Mimetizado entre incontables
Hasta luego
Como cinta clara
Adherida en su descanso inamovible
Del cristal cálido de la tarde
Casi imperceptible
Derrite sus pasos con los años
Hasta excavar los cimientos
Cansados de su adormecida existencia.

En su frágil voz
Se rompen las cuerdas de su aliento
Sin oxígeno, desde su mecedora
Las bóvedas de su pecho se desinflan
Como una bolsa perforada  
Que Parece silbar
A cada bocanada
Y su asma dice
Que intenta respirar.

miércoles, 4 de abril de 2018

Noche


Se necesita pastizales secos
Si quieres ver arder el campo
Tú abrazo
Para apagar las llamas 
de un río triste
Un par de ojos café
Que vean
Cuando escucho tus palabras
Arrastrando el sabor dulce del mango
A mis pulmones.  

Aunque en este campo
Solo el carbón humeante
Pinte de verde el ejido
El río de lodo escamado
Fluye rodando
Hacia la orilla opuesta del amanecer
Ansioso de quitar la sed
Que dejó la noche
Al besar con su neblina
Los quebrados pasos
De tu errante resuello
Buscando su dulce asfixia.


sábado, 10 de marzo de 2018

Encontrarnos


Encuentra un lugar
Donde las rosas
Puedan dejar sus espinas
Un rincón donde no llegue tú escoba
Y allí
Deja un retrato del atardecer
Espera que la tarde caiga
Toma algo de pared
Y duerme un poco
En el derrumbe
De tus pensamientos.

Es tiempo de completar el vacío
Agregar vacío,
Para estar completamente lleno
Y poder vomitar lo insustancial
Llega a la superficie
Vuelve a tocar la canción
La melodía triste de la felicidad.

Grita los colores
Que describen tus meditaciones
Congela el tiempo
Todo estará bien
Abraza las ideas azules
Besa el amarillo
Encuentra la paz
En el verde rojizo del atardecer
De la montaña.

Si alguien puede verme
No piense que estoy atrapado en mi locura
Si alguien puede oírme
Dígale, que volveré a navegar el cielo
Mientras camino tras su universo
Si alguien puede Hablarme
Solo grite
¡No saltes!